De historiadora del Arte a Diseñadora UI/UX

¡Hola de nuevo, familia!

Hoy quiero compartir con vosotros un poco más de este viaje que emprendí hace cosa de un año. De la montaña rusa de emociones que ha sido y de cómo he llegado hasta aquí. Está siendo un trayecto algo turbulento, no os voy a mentir. Empezar de cero nunca es fácil y apostar por el cambio siempre da algo de vértigo, especialmente cuando tu trayectoria profesional no tiene una base en el diseño, como es mi caso.

Siempre he sido una persona con inquietudes culturales. El arte me fascina no solo por su estética sino especialmente por su capacidad de contar historias. Las obras de arte nos hablan de sus tiempos, de sus gentes, de sus costumbres e ideales. Una obra de arte puede decirte más sobre una época histórica que una enciclopedia. Porque en el arte se transmiten emociones, energías y se capturan momentos que trascienden más allá de las palabras. El arte nos habla también del comportamiento humano, su forma de pensar, de expresarse y de entender las cosas. Su forma de ver y de plasmar el mundo que le rodea.

Por todo esto, decidí estudiar Historia del Arte y dedicarme a ello. Y así lo hice durante un tiempo, trabajé en una galería de arte en Barcelona, primero como asistente, más tarde como Manager. Pasé más de tres años implicada en este mundo y aprendí mucho. Disfruté ayudando a los artistas a preparar sus exposicones, a difundirlas, a acompañarlas de historias y a hacerlas realidad. Pero hay una parte de este mundo que no te cuentan cuando estás estudiando. La precariedad. Después de unos años en un sector que me inspiraba profundamente pero a penas me daba de comer decidí dar el salto a nuevas opciones que me permitiesen crecer, seguir aprendiendo y también pagar el alquiler.

Como en la galería había tocado muchos palos, y el de la comunicación y el Marketing eran los que más disfrutaba, empecé un nuevo trabajo como Talent y Content Manager en una agencia de modelos. Hacía de todo, desde gestionar castings hasta crear contenido para Redes Sociales, elaborar copies para las campañas de Email Marketing y mantener al día la página web. Fueron años intensos y de mucho trabajo.

Después de esto me surgió una de las oportunidades más importantes de mi vida, la de irme a vivir a Suecia. Allí me ofrecieron trabajar en una startup que quería lanzarse al mercado Español. Tuve la gran suerte de formar parte de ese lanzamiento y de ver cómo se construía y diseñaba un producto prácticamente desde cero. Allí descubrí por primera vez lo que era el diseño UI/UX y empecé a entender todas las implicaciones que conlleva la creación y presentación de un nuevo producto al mercado. Fue una experiencia única. Formar parte de una startup es otro mundo, otro rollo. Con sus luces y sus sombras, pero, sin duda, especial y muy inspirador.

En ese momento lo vi claro. Mi lugar estaba allí, donde los diseñadores. Yo no tenía ni idea de diseñar, ni siquiera se me da bien el dibujo, pero investigué, me propuse entender en qué consistía ser diseñadora UI/UX y entendí que podía hacerlo. Que, en realidad, muchas de mis soft skills (de esto hablo aquí) eran perfectamente aplicables al diseño UI y, especialmente al UX. Y que si me proponía aprender y esforzarme, podría conseguir hacerme un hueco en el sector.

Todo esto os lo cuento para explicaros que, no importa si vienes de un lugar que aparentemente no tiene nada que ver con el diseño UI/UX (o con lo que sea que quieras hacer). Que todo el conocimiento que has adquirido en tu vida es útil y te construye como profesional y como persona. Y, sobre todo, que aunque a veces tardemos en encontrar nuestro camino, aunque nos desviemos, nos perdamos o nos quedemos bloqueados un tiempo, es importante seguir avanzando y seguir buscando nuestra pasión, lo que nos mueve y nos hace sentir completos.

Ahora que ya me conocéis un poco mejor empezaré a compartir con más detalle todos aquellos procesos, herramientas y recursos que me han servido para conseguir acercarme más a mi objetivo: Convertirme en diseñadora UI/UX. Espero que os sirvan, os ayuden o, cuanto menos, os inspiren para perseguir vuestros propios objetivos.

Gracias por leerme,

Irene

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Soft Skills: La Clave del Éxito en Diseño UI/UX

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Una gran aventura.